System Of A Down
Si hay una banda que vino a pegar un golpe en la mesa en la historia del metal alternativo, es imposible no mencionar a System Of A Down. Originarios de Los Ángeles, California, y con raíces armenias, lograron crear un estilo inconfundible combinando riffs brutales y agresivos con melodías que se meten en tu cabeza y una fuerte carga política en sus letras.
De Los Ángeles al estrellato
Formada en 1994 por Serj Tankian (voz), Daron Malakian (guitarra y voz), Shavo Odadjian (bajo) y John Dolmayan (batería), System Of A Down llamó la atención desde sus primeras actuaciones en Los Ángeles haciendo mucho ruido, en todos los sentidos. Con su álbum debut de 1998 System of a Down ya nos pudimos hacer una idea de lo que se nos venía encima, pero fue con el álbum Toxicity del 2001 con el que saltó toda la escena musical por los aires. Chop Suey!, Toxicity, Deer Dance o Aerials se convirtieron automáticamente en himnos, y a partir de ahí su subida fue descomunal. Ya no había quien parara el fenómeno SOAD.
La locura y el desenfreno como estilo
Lo que hace a System Of A Down una banda especial es su capacidad para mezclar géneros aparentemente incompatibles sin miedo al resultado. Un minuto estás escuchando un riff asesino brutal y al momento un fragmento melódico con influencias del folk armenio. Lo más divertido de todo es que funciona, ¡y de qué manera!. Su música es un cóctel molotov de metal, punk y melodias psicodélicas, con letras que abordan temas como la guerra, la corrupción, la hipocresía política y la lucha por los derechos humanos, siempre con una actitud irreverente y desafiante.
Daron Malakian es el genio tras la guitarra, afilada como el machete de Rambo, con sus cambios de ritmo inesperados, mientras que Serj Tankian sobresale por su capacidad vocal única, pasando de susurros a gritos desgarradores en cuestión de segundos. La base rítmica de Shavo y John mantiene todo este caos controlado en su sitio mientras la locura fluye, dando como resultado un sonido explosivo que no se parece a nada más en la escena del metal.
El impacto de Mezmerize/Hypnotize y el parón que nos partió el corazón
En 2005 lanzaron Mezmerize y Hypnotize, dos discos complementarios que continuaron con la evolución del sonido de la banda, dotando a sus temas de un enfoque más experimental y un sonido más pulido, pero manteniendo sus características letras cargadas de sátira. Destacan temazos como B.Y.O.B., Question! o Hypnotize.
Sin embargo, tras el éxito de estos álbumes, la banda decidió tomarse un descanso indefinido en 2006. Aunque no se separaron oficialmente, cada miembro se enfocó en proyectos personales. Tankian lanzó discos en solitario, Malakian fundó Scars on Broadway y los fans nos quedamos huérfanos esperando su regreso, algo que se antojaba complicado.
El regreso y el futuro incierto
Sin embargo, en 2010, System Of A Down anunció su regreso a los escenarios con una serie de conciertos y festivales. Desde entonces, han seguido tocando en vivo de manera intermitente, pero sin lanzar nuevos álbumes durante más de una década….hasta 2020 cuando sorprendieron al mundo con dos nuevas canciones, Protect the Land y Genocidal Humanoidz, dos temas cargados de rabia y protesta por la situación en Armenia.
Aunque el futuro de la banda sigue siendo una incógnita, su legado sigue intacto. System Of A Down ha marcado un antes y un después en la historia del metal y la música alternativa, demostrando que la creatividad y la autenticidad pueden destacar en una industria donde muchos prefieren ir a lo seguro.
Este año 2025, System of a Down estará realizando actuaciones en Sudamérica y Norteamérica con su gira Wake Up!
Conclusión
System Of A Down no es solo una banda de metal, es un fenómeno cultural que ha desafiado las normas del género con su inconfundible estilo. Ya sea por su explosiva energía en vivo, su crítica social o su innovación sonora, siguen siendo una referencia obligada para quienes buscan algo más en la música pesada. Pueden pasar años sin que saquen música nueva, pero sus temazos seguirán sonando con la misma potencia de siempre. Su legado ya es historia pura del escenario metalero. ¿Habrá un nuevo álbum en el horizonte? Solo el tiempo lo dirá, pero lo que es seguro es que su impacto jamás se desvanecerá.
Así que si no los has escuchado, no sé qué esperas. Y si ya los conoces, pues pon Toxicity a todo volumen y déjate llevar por la locura.
Puedes consultar otros análisis y críticas en el apartado críticas de nuestro blog Metalmaniac.
See you space cowboy!
